José María Madariaga y Casado (1853-1934)
José María Madariaga y Casado
Introductor de la electrotecnia en España
José María Madariaga nació en Hiendelaencina (Guadalajara) el 3 de julio de 1853. Éste era un pueblo escondido, en el que el reciente descubrimiento de filones de plata había provocado una “fiebre” que atrajo a muchos buscadores de distintas partes de España; entre otros los padres, vascos, del futuro ingeniero.
Se matriculó para cursar estudios en la Escuela de Ingenieros de Minas de Madrid en 1872 e inició sus actividades profesionales en Almadén. Posteriormente, trabajó también en Vizcaya y Córdoba. En 1886 se trasladó a Madrid y prestó servicios en el Laboratorio de Química de la Escuela hasta 1891, año en que pasó a desempeñar la recién creada Cátedra de Electrotecnia. En 1913 ascendió a inspector General del Cuerpo de Ingenieros de Minas, y fue designado director de la Escuela, cargo que ocupó entre 1913 y 1916.
Impartió cursos superiores sobre Electrotecnia en el Ateneo, entre otros lugares destacados, y fue elegido académico de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales en 1902. Asistió como delegado del Gobierno a distintas conferencias en Londres y Berlín, y fue autor de numerosas publicaciones sobre autoinducción de las líneas aéreas de transmisión, bombas centrífugas de alta presión, imágenes eléctricas, teoría del oscilógrafo, etc.
Puede considerarse, sin exageración, a Don José María Madariaga como el introductor en España de las enseñanzas sobre Electrotecnia y sus diferentes técnicas de empleo y aplicación. Sus seguidores formaron una importante escuela de formación electrotécnica, que dio a los ingenieros de minas puestos relevantes en la industria energética nacional durante muchos años.
En reconocimiento a su labor existe en la Escuela de Minas de Madrid desde hace 30 años un Laboratorio oficial que lleva su nombre, dedicado a seguridad eléctrica en minería, atmósferas explosivas, pirotecnia y calderas de gas.